Y deseo que los mejores regalos sean rostros iluminados de sonrisas.
Arrugas de felicidad, de esas que jamás ninguna crema o tratamiento logrará reducir.
Ilusión que hace brillar las miradas, incluso aquellas que contienen los ojos que llevan apagados desde hace algún tiempo.
Deseo que en esta noche no falte la magia, la sorpresa.
Los momentos, la emoción inmaterial, que aunque intangibles vienen envueltos en el mejor papel de regalo, el del amor.
Deseo que en este día se nos olviden las preocupaciones, saltemos como cuando éramos niños, saludemos a la magia que nunca la edad nos debería arrebatar.
Deseo que entreguemos amor, felicidad, libertad, ilusión y vida, porque esos son los mejores regalos que se esconden detrás de cada paquete, grande o pequeño.
Siempre.
