Que bonito es cuando dos personas con tan solo mirarse a los ojos se lo dicen todo sin ni siquiera haber dicho nada.
Que bonito es conocer ese gesto, que precede a un ataque de risa. De esos, espontáneos, sin motivo, pero que se convertirán para siempre en una eterna anécdota.
Que bonito es compartir tantos momentos feos y bonitos de tu vida sintiendo como ella sostiene tu alma en su mano.
Que bonito es sentir como una casualidad trajo a tu vida a una compañera de batallas que nunca se ha perdido en la guerra.
Que bonito es encontrarse en el mismo punto a pesar de las diferencias, porque juntas no hay lugar a la resta. Todo suma.
Que bonito cuando el tiempo siempre supera las ganas.
Que bonito cuando la sinceridad camina acompañada de la empatía.
Que bonito cuando sabes secarte las lágrimas para seguir siendo el paño en el que desahogue su desconsuelo. Sin juzgar.
Que bonito que dos personas se conozcan tanto como para quererse siempre, perdonarse siempre y olvidarse nunca.
Y es que, que bonita es la amistad.
