Diciembre

por Auro

Mes de ilusión, de luces, de encanto.

De naturaleza blanca y frío que aunque hiela es incapaz de congelar el alma.

De familia reunida, física o emocionalmente.

De hogar y de la ansiada vuelta a casa.

De momentos dulces que se disfrutan en la mesa pero más aún en el corazón.

De ilusiones compartidas.

De búsqueda de tesoros que regalar, donde lo más importante es el agradecimiento, la ilusión y la felicidad que los envuelve, no el contenido en si mismo. 

De nuevas etapas que comenzar con la inspiración de cumplir un año más.

De finales, despedidas, pérdidas y ganancias.

De balances positivos y negativos del año vivido y dejado ya atrás.

De resúmenes del año a partir de los que fijamos los propósitos para el siguiente.

Y es que para mi, diciembre es todo eso. 

Es un mes que representa vida al regalarme un nuevo año que experimentar. 

Es un mes que representa amor al compartir con las personas más importantes de mi vida los momentos de hogar, calidez y dulzura.

Es un mes que representa ilusión, al sentir nervios por sorprender y por ser sorprendida en cada momento. 

Es un mes que representa ausencias y recuerdos coleccionados cada uno en forma de risas y momentos compartidos que estarán siempre presentes en el corazón aunque ese año los sitios en la mesa estén vacíos.

Es un mes de luces, de blanco, de compartir cada instante de felicidad. 

De optimismo iluminador que alimentado del amor de los nuestros, la ilusión y la felicidad nos devuelve a aquel punto de infancia en el que la única preocupación era ser feliz y divertirnos cada día. 

Y por eso, me encanta diciembre.

Porque nos da la oportunidad de recordar y analizar lo pasado pero con el corazón henchido de energía para sentirnos capaces de afrontar nuestros próximos cambios y pasos vitales en el nuevo año. 

Te podría interesar

Deja un comentario